Priscilla Bousek, la nueva voz de la música latina, continúa poniéndole ritmo y sabor al verano con el lanzamiento de su primer álbum auto-titulado, el cual salió al mercado el 19 de julio a través de todas las plataformas digitales. El álbum, que presenta cinco contagiosos temas de la autoría del compositor chileno Guillermo “Wille” López, padre de Priscilla, fue grabado en Chile, bajo la producción de Carlos Olguín Salazar.
Entre los temas se destaca el nuevo sencillo promocional, “Embrujo”, una cadenciosa rumba que habla sobre la pasión y el embrujo de una noche de amor. El tema es apoyado por un video musical que fue grabado en Puerto Rico y presenta la historia de una mujer que sueña que es capaz de hacer promesas y conjuros para no perder al amor de su vida. El mismo fue grabado en diferentes lugares de Puerto Rico, incluyendo el Viejo San Juan, la Finca de Girasoles de Guánica y la Guancha en Ponce. La producción estuvo a cargo de Dèxios Design, bajo la dirección de Gabriel Dávila-Luciano.
La culminación de un sueño
“Este álbum es la culminación de un sueño”, dijo Priscilla. “Siempre quise y tuve como meta grabar los temas de mi papá, así que cuando apareció esta oportunidad, no la dejé pasar. Trabajar junto a mi padre es un gran orgullo para mi. Ha sido un proceso muy hermoso que nos ha llevado tiempo y esfuerzo, pero estoy muy feliz con el resultado final”.
El álbum también incluye el que fue el primer sencillo, “Ay, Ay, Ay Corazón”, una bachata romántica y bailable que fue un gran éxito en la voz de la reina de la lambada, Natusha, en los años 90. Por su parte, en “Amar Queriéndose Amar”, el segundo corte promocional, Priscilla le da vida al son cubano con una interpretación llena de energía y color. Otros temas incluidos son “Y Volar”, una canción pop con ecos de música electrónica, y “Por Favor Que Sea Un Sueño”, una bachata que trata sobre el desamor y el sufrimiento de una relación que se termina.
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Con este álbum, Priscilla no solo demuestra su talento y carisma, sino también una gran madurez vocal para interpretar diferentes géneros y estilos musicales.
Priscilla nació y creció en Venezuela hasta los 13 años cuando emigró al país de sus padres, Chile. Allí siguió cultivando su amor por la música y descubriendo más de cerca los ritmos de la cultura de sus padres. Aunque su sueño era estudiar artes musicales, otros factores la llevaron a optar por una licenciatura en Ingeniería Ambiental.
Luego de graduarse de la universidad, Priscilla emigró a los Estados Unidos, donde su vida la ha llevado a viajar por diferentes lugares, siempre bailando y cantando con el sueño de poder algún día grabar los temas de su padre profesionalmente. En cada lugar que vivió, Priscilla se empapó de la cultura local y de sus ritmos musicales. Fue así como se enamoró de la música tropical en Puerto Rico y del son cubano en Miami, ciudad que le volvió a recordar su amor por la música y la impulsó a perseguir su sueño. El resultado es un exquisito álbum que refleja las influencias musicales con las que Priscilla se nutrió durante todo este tiempo previo a su debut musical.
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