Los detalles no pasan inadvertidos, dan cuenta de la gratitud. Todo es real. Nada una fantasía sostenida por el diablo. Nada una ilusión tóxica y devastadora de estos tiempos de Azazel anaranjado.
Mi última naranja a los pies del santo.
Apago las luces. No tengo bendiciones.
Digo gracias por el agua
y la madera del árbol.
Digo gracias por la vida
y su misericordia.
Gracias por Spiderman
y el Principito. Gracias por ambos
El fuego y la naranja son primos hermanos.
Inclino mi cabeza
rezo para que mi extrañeza sea santa
No sé si hay una línea directa con Dios.
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