¿Qué es vida saludable?

A mucha gente le genera estrés cuando les hablan de estilo de vida saludable porque piensan que requiere de grandes sacrificios, entre ellos una dieta super estricta que nos deja en agonía, soñando con un pedazo de pastel o un helado. También se asocia con vida saludable un programa fuerte de ejercicios que nos mantiene con dolores musculares incómodos y por supuesto sin ganas de volver al gimnasio.

Les prometo que lo pueden lograr sin estrés, haciendo pequeños cambios en la rutina diaria y tomando decisiones sencillas para construir una base sólida y de esa forma iniciar un estilo de vida saludable.

Un programa que comienza con una sonrisa

• Comienza la mañana con una sonrisa. Está demostrado que las personas que sonríen son más felices.
• Incluye 20 minutos de ejercicio físico en tu rutina diaria. A mi me gusta hacer mis ejercicios por la mañana para tener más energía y además me hace sentir bien conmigo misma. Realizar ejercicio de manera constante produce múltiples beneficios, como reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, quemar calorías, y fortalecer músculos y huesos.
• No te saltes ninguna comida, mucho menos el desayuno; aunque no tengas apetito por la mañana, toma un batido de proteína vegetal con frutas que te va a ayudar a obtener la energía para empezar el día.
• Bebe más agua e infusiones naturales. Si eres adicta a los refrescos (sodas) disminuye poco a poco la cantidad que te tomas a diario hasta que ya ni te acuerdes de ellos.
• Incluye más vegetales y verduras en tus recetas y menos carbohidratos refinados y azúcar.
• Evita el excesivo consumo de lácteos.

“De acuerdo al Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de Estados Unidos (NIDDK, por sus siglas en inglés), de 30 a 50 millones de personas en este país son intolerantes a la lactosa: el azúcar presente en la leche y sus derivados. Datos de la facultad de Medicina de Harvard, indican que hasta el 70% de la población mundial es intolerante a la lactosa. La intolerancia entonces, no es una enfermedad, sino un estado fisiológico normal. Esto ocurre porque entre los dos y cuatro años de edad, nuestro cuerpo empieza a perder el poder de la enzima lactasa, que es la responsable de digerir la lactosa. Al seguir consumiendo leche, la lactosa que no se digiere permanece en el intestino, donde es fermentada por las bacterias del colon, lo que nos causa gases, dolor e inclusive diarrea. 

La proteína de la leche, la caseína, es la que impide que podamos absorber el calcio que contiene. Esto ocurre porque al consumir proteínas animales, el pH de la sangre se vuelve ácido y el organismo, como reacción, saca parte del calcio que tenemos en los huesos para poder neutralizar esa acidez”, (CNNE 19 Junio 2013).

Comer bien, hacer ejercicio, sentirnos bien, bajar el estrés. Tenemos las mismas metas, sin embargo, es todo un reto llevar una vida en equilibrio, porque andamos siempre a prisa, comemos cualquier cosa y todo el día estamos ocupados.

Son muchos hábitos los que tenemos que cambiar y si quieres que tu vida cambie, empieza poco a poco, porque esos pequeños cambios te convertirán en una persona más saludable. 

Si estableces objetivos fuera de tu alcance, nunca lo lograrás. 

Recuerda que todos somos diferentes y que la edad y la genética influyen en nuestro cuerpo.

Si tus metas son concretas, será mucho más fácil llegar a ellas. ¡Lo importante es comenzar!

 

 

También te puede interesar:

https://lanota-latina.com/cual-es-el-proposito-de-tu-vida/

 

 

Artículos Relacionados