Una ballena de 30 años en SeaWorld murió este lunes luego de enfermarse durante el fin de semana, dijo el parque temático. Pueden pasar varias semanas antes de que SeaWorld descubra la causa de la muerte de Kayla y están monitoreando a las otras cinco orcas que viven en el parque de Orlando, informó el diario Orlando Sentinel.
«Es posible que las otras orcas se vean afectadas socialmente por su muerte, y los conductistas de la orca estarán vigilando de cerca a las otras ballenas», dijo SeaWorld en un comunicado. «Sin embargo, no anticipamos ningún problema de salud física entre las otras orcas».
Kayla había estado sana por lo demás, dijo SeaWorld, hasta que la primera indicación de que algo estaba mal fue el sábado por la tarde cuando Kayla mostró «signos de incomodidad».
«Sus veterinarios comenzaron el tratamiento de inmediato por un examen físico. Desafortunadamente, su condición empeoró el domingo. Aunque los especialistas en cuidado de animales y los veterinarios atendieron a Kayla durante todo el día, no sobrevivió», dijo el comunicado.
Kayla murió junto a un especialista en cuidado de animales a alrededor de las 12:15 a.m.
«Toda la familia de SeaWorld está profundamente triste por la pérdida», dijo el parque temático. «Si bien hoy es un día difícil para todos nosotros en SeaWorld, Kayla inspiró a generaciones de huéspedes y empleados a cuidar y aprender más sobre esta increíble especie».
Kayla fue la segunda orca más antigua nacida en cautiverio, dijo la Dra. Naomi Rose, una científica de mamíferos marinos en el Instituto de Bienestar Animal.
Para una orca, «30 es lo mejor de la vida», dijo Rose, quien trabaja para el grupo de defensa de los animales quien ha sido crítica con SeaWorld en el pasado.
«Eso es como ser literalmente una mujer de 30 años. Morir a los 30 no es normal», dijo Rose, señalando que se sabe que las orcas en la naturaleza viven hasta 80 o 90 años.
La edad promedio de las ballenas asesinas en libertad es 50 años después de haber sobrevivido a los primeros seis meses de su vida cuando son más vulnerables, dijo.
La compañía tuvo problemas en los últimos años después del documental «Blackfish», que contó la historia de la muerte de un entrenador de SeaWorld Orlando y retrató el cautiverio de las ballenas de forma negativa.
La asistencia se redujo y la empresa luchó financieramente. Disminuyó aún más detrás de Walt Disney World y Universal Orlando, que se están expandiendo fuertemente y añadiendo nuevas atracciones.
El ex presidente ejecutivo Joel Manby anunció que la compañía había detenido su programa de reproducción de orcas en 2016.
Los espectáculos de orcas teatrales de SeaWorld Orlando estaban programados para terminar en 2019, había dicho Manby en ese momento.
FUENTE: ORLANDO SENTINEL
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