Me fui a Palm Spring, uno de esos lugares de culto, donde los artistas se escapan para recuperar energías y donde los jugadores de golf encuentran más canchas de ese perezoso y aristocrático deporte. Llegué a esta preciosa ciudad para probar los Audi S4 y S5, los modelos que algunos periodistas del medio llaman “de culto para los compradores de Audi”.
Tanto el sedán Audi S4 como la coupé S5 comparten el mismo y nuevo motor V6 de 3.0 litros turbo, y solo se notan muy pocas diferencias en el manejo.
Según Frank Lamberty, el diseñador del auto, el S5 es un vehículo que le trae más emoción que el Audi S4. Los faros LED son diferentes, la parrilla es más baja y más ancha, y la capucha tiene pliegues y líneas diferentes, de acuerdo con un modelo que está destinado a ser más GT que un sedán.
El S5 es más bajo (1,4 pulgadas / 36 mm) que la S4, y más corto tanto en longitud total (2,1 pulgadas / 53 mm) y distancia entre ejes (2,4 pulgadas / 61 mm), pero es siempre ligeramente más ancho (0,2 pulgadas / 4 mm).
Este nuevo V6 de 3.0 litros con 354 HP y 369 libras-pie de torque, incrementó la potencia ante los viejos motores del S4 y S5 anteriores, tanto el V6 como el V8. Este motor está acoplado a una transmisión automática Tiptronic de ocho velocidades, con las palancas de cambio de paletas necesarias.
El sistema de asistencia al conductor, necesita una transmisión automática para utilizar todas las funciones, por lo que no hay una transmisión manual. Raro para un deportivo. Pero es una buena decisión de Audi, ya que en Estados Unidos ya casi nadie quiere una transmisión manual.
Audi colocó para este nuevo V6 un único turbo de doble cilindro en la parte superior del motor en el valle de la V, en lugar de colgar dos turbos más pequeños fuera de la V6.
El proceso de combustión en el nuevo motor es un ciclo de Miller modificado que alcanza el par máximo de pico bajo, de 1.370 a 4.500 rpm. La potencia máxima se alcanza más arriba, de 5.400 a 6.400 rpm. Las funciones de estos modelos incluyen la clásica tracción a las cuatro ruedas de Audi, “Quattro”, con vectorización electrónica de par. Un diferencial central autoblocante normalmente divide el par de torsión 40/60 delantero y trasero.
El paquete deportivo S permite al sistema dividir activamente el par en el eje trasero a través de un par de embragues en cada mitad del eje. Es ajustable a través del sistema de selección Audi Drive, que le permite elegir entre cuatro modos diferentes, confort, auto, dinámico e individual, para establecer el tipo de sensación de conducción que desea.
Puede ajustar los puntos de cambio, dirección, control del amortiguador e incluso los ajustes de control de crucero. Las nuevas piezas de suspensión de aluminio reducen el peso no suspendido en la suspensión delantera de cinco enlaces. El soporte de dirección coloca ahora en el centro del extremo delantero para un control más preciso a través de la rueda.
Varios sensores del vehículo le advierten de cualquier problema inminente que viene de casi cualquier dirección que sea. El S4 pesa 3,858 libras y el S5 pesa 3,836 libras. Los asientos son muy cómodos y se pueden configurar a su gusto. Son multi-ajustables, por lo que cualquier persona alta, baja o gorda estará cómoda.
Probando
Empecé a conducir la coupe S5 primero. La dirección y el equilibrio se sentían bien en la ciudad con lenta conducción. La dirección se sintió bien conectada a la carretera, y la respuesta del acelerador del nuevo motor fue rápida. Su aceleración fue muy buena. Cada vez que pasé uno de esos lentos que andan en la carretera, el S5 respondió de maravilla, con una transmisión que seguía los pasos del motor. Ni qué hablar en cada curva, que fueron cientas, donde la técnica alemana nunca falla.
Luego del almuerzo me subí al S4, que daba la muy pequeña sensación de mayor solidez en las curvas. Al final del día, quizás hubiera elegido el coupé sobre el sedán, pero en el manejo, casi no hubo diferencias. Son dos modelos muy exquisitos para conducir.
El precio comienza en US$ 51.875 para un S4, cerca del precio de competidores como el Mercedes C43 y el Jaguar 35t R-Sport, no así el BMW que es más caro, mientras el Lexus comienza más barato. Con el precio base también consigue un sistema de sonido de Bang & Olufsen de 19 bocinas, los paneles de la puerta de Alcántara, un volante de fondo plano, y asientos deportivos ajustables de ocho vías, arreglados en un cuero cosido diamante.
Los asientos también le darán masaje en el comando y le calentarán en el invierno, y si quiere que lo refresquen en el verano están disponibles como una opción.
El Premium Plus también requiere que usted gaste algo de dinero si desea la pantalla Virtual Cockpit. Eso viene de serie con el Prestige S4 más caro, a un precio de U$ 55.800. Es un adicional de $ 1,800, pero te consigue uno de los mejores sistemas en el mercado, ahora de conducción semi-autónoma. Este sistema hará su trabajo en los largos viajes de la carretera.
No hay muchas compras cruzadas entre los fieles. A ellos no les hablen de su competencia: los BMW 340i, Mercedes C43, Lexus IS 350 F Sport y el Jaguar XE 35t R-Sport.
En la mente de los compradores de Audi, no hay competencia, y como dicen los de Audi: “los compradores de S4 no están buscando en ningún otro lugar”. Por ahora, el S4 y el S5 son sus autos de rendimiento, el Audi de su elección. Y luego de conducirlo, ya sé por qué.
Enrique Kogan
Twitter: @purosautosus
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