Los ejercicios durante el embarazo, realizados de forma moderada por mujeres, pueden ayudar a sus bebés a evitar la diabetes, la obesidad y las enfermedades cardíacas.
Las mujeres que hacen ejercicios moderados durante el embarazo pueden ayudar a sus bebés a evitar la diabetes, la obesidad y las enfermedades cardíacas. Esto se debe a que la actividad física antes de dar a luz podría ayudar a aumentar un compuesto importante que aumenta los efectos protectores de la leche materna.
El nuevo estudio, publicado en la revista Nature Metabolism, analizó cómo la leche materna ayuda a transferir los beneficios para la salud de los animales y humanos en forma física y embarazadas. Los investigadores esperan que los hallazgos guíen el desarrollo de nuevos productos que puedan proteger a los bebés y a los niños de enfermedades de por vida.
El estudio de embarazo
«Hemos realizado estudios en el pasado que han demostrado que el ejercicio materno mejora la salud de la descendencia, pero en este estudio, queríamos comenzar a responder a la pregunta de por qué», manifestó Kristin Stanford, autora principal del estudio e investigadora del Ohio.
Por su parte State Wexner Medical Center, dijo en un comunicado. «Debido a que hay evidencia de que la leche materna juega un papel importante, queríamos aislar sus efectos en la salud de la descendencia».
Para el estudio, Stanford y sus colegas observaron por primera vez cómo funciona la leche materna en ratones recién nacidos. Los investigadores proporcionaron leche de ratones que estaban activos durante el embarazo a cachorros nacidos de madres sedentarias.
Los resultados mostraron que la leche materna de ratones activos ayudó a mejorar la salud de los bebés de madres sedentarias. Luego, el equipo se trasladó a 150 mujeres embarazadas y en posparto para ver si con los humanos se podían obtener los mismos beneficios.
Ejercicios y embarazo
Las participantes fueron seguidas utilizando rastreadores de actividad mientras hacen ejercicio durante y después del embarazo. Los investigadores encontraron que las mujeres que tenían más pasos por día tenían una mayor cantidad del compuesto beneficioso llamado 3SL en su leche materna, que potencialmente proporciona los efectos protectores para los bebés.
El aumento en 3SL [no estaba] necesariamente relacionado con la intensidad del ejercicio, por lo que incluso el ejercicio moderado como una caminata diaria es suficiente para obtener los beneficios. El ejercicio también es excelente para su salud en general durante y después del embarazo, por lo que cualquier cosa que pueda hacer para moverse le beneficiará tanto a usted como a su bebé”, dijo Stanford”.
Los investigadores apuntan a continuar el estudio para encontrar una manera de aislar el compuesto 3SL de la leche materna de las madres activas y usarlo en una nueva fórmula infantil. Stanford agregó que el esfuerzo ayudaría a los bebés de mujeres que no pueden amamantar.
Fuente: Medical Daily
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