Lourdes Olmos-Cunningham, es una escritora de origen mexicano, autora, entre otros, del libro “Pájaros Migratorios”.
Cuando me puse a escribir esta columna, me propuse dar a conocer el trabajo poético de la escritora de origen mexicano Lourdes Olmos-Cunningham. En el camino de la redacción me enredé con los haikus, poesía japonesa de la que me enamoré cuando estaba en pleno proceso de crear mi primera novela. Época, además, en la que no podía concentrarme para leer ninguna obra literaria extensa y los haikus, con sus cuerpecitos breves de tres versos, eran como una vitamina miniatura de letras. Como para algunas cosas descuello y para otras me voy a bruces al pavimento, no me había dado cuenta de que no podía leer porque había perdido el foco en la visión. En otras palabras, me estaba quedando paulatinamente miope y la poca capacidad de concentración no era por una azotea desordenada, sino por mis ojos agotados. Lo de la vista quedó solucionado hace un par de años, cuando me dijeron que sí, que avanzaba sin retorno hacia un mundo borroso y me hice asidua a las tiendas de $1, donde me compro todos mis anteojos de marcos multicolores. Lo de la azotea desordenada, me temo admitir, no se va a resolver jamás. De tal manera, algunas de estas columnas salen más peinadas que otras, pero todas llevan alma, cuerpo y mente.
Volviendo a Lourdes Olmos-Cunningham, -¿se fijó que ya me iba por las ramas otra vez?- siempre he sido una buena lectora de poesía y con esto quiero decir que la disfruto, me transporta, me inspira y me motiva. Sin embargo, no por mucho que me guste, he podido yo escribir ni haikus ni ningún tipo de lírica. Menos aún podría compartirla, porque me parece el acto literario más valiente, donde evidenciamos aquello que deseamos ocultar cuando metemos la panza antes de que nos tomen la foto. Por eso admiro a los poetas y habiendo la posibilidad, les observo como quién va al museo. A Lourdes la conocí por teléfono primero y en persona después, hace casi un año en Dallas, Texas. El libro que me dio se llama “Pájaros migratorios” y es una colección de poemas que abordan temas como (fragmentos seleccionados por su servidora)
… los viajes y la migración,
Casas de Bewerwijk
Pequeñas casas de ventanas abiertas
y lámparas nocturnas
historias de hombres y mujeres
que habitan un tiempo delicioso
de estrellas de mar bajo la arena.
… la pasión y el amor,
Supervivencia
Hombres murciélago de ojos linterna
Te di el poder para amarme
Y te convertiste en sucio mercenario de mis emociones
…el paraíso perdido.
Estamos llenas
De aromas frutales
y sabores agridulces
que alguna vez pertenecieron a los seis
o siete años que tuvimos
Cuando nos reunimos, Lourdes me pareció una mujer agradable a quién le gusta más escuchar que opinar y que se dedica a lo suyo, las letras, sin mayores aspavientos. Tamaña fue mi sorpresa cuando me puse a leer su libro, porque detrás de esa semi sonrisa tan característica de Lourdes, el lector no adivina la pasión, la potencia, ni la fuerza que sus poemas ofrecen. Y es que cada cual lleva un vendaval en el pecho.
Estoy a punto de embarcarme a una gran fiesta literaria en mi país natal, Chile; y por lo mismo, me deja el tren de pensamientos a cada hora y pierdo el hilo de la idea, para luego encontrarlo colgando en el armario junto a los abrigos. Como no quería irme sin antes dejarles con un pedacito de cielo en la forma de poesía, asumí que esta sería una de esas columnas despeinadas, pero por una buena razón, los versos de Lourdes te hacen sentir arrobado, infante, con la piel enrojecida por el sol, de tan viva y de tan vibrante. Me disculpo si no he podido hacerle justicia al universo que palpita entre las páginas de Lourdes, pero si quiere leer más y arrobarse por sí mismo, aquí puede comprar el libro de esta talentosa poeta mexicana: http://goo.gl/LwwUPN
Breve biografía de Lourdes Olmos-Cunnigham: Monterrey, Nuevo León, México, 1967.
Comienza a escribir a los 19 años de edad, publicando su primer poemario “colores para gritar,” con el que gana un concurso de poesía de su localidad. Ha colaborado con variadas publicaciones literarias y artísticas. Ha sido becaria en el rubro de poesía en dos ocasiones: Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León (CONARTE) 1997 y para el Instituto Tamaulipeco para la cultura y las Artes ( ITCA) 2003; y ha ganado diversos galardones por su obra. Vive en Dallas con su familia y ha incursionado en la narrativa con la novela «Lo que sucede en el Wilder Ness».
Redes sociales:
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Twitter: @a_amosson
Blog: http://espejuelo.wordpress.com/
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