Situaciones que parecen triviales. Hechos que, al parecer, podrían ocurrir en cualquier parte. Historias de hombres y mujeres en búsqueda de algo. La necesidad constante de restituir la memoria para que no quede ningún cabo suelto. La madurez y los rumbos que se deben tomar al escoger un camino. La idea concebida como felicidad cambia según las circunstancias y desde la colina que se mira. De sucesos desafortunados surgen cosas muy felices si se presta la debida atención. No hay respuesta digital a la felicidad, sus ondulaciones no son simétricas. A menudo viste nuestros días, pero no la vemos porque estamos afanados en algo distante a un kilómetro que parece ser un brillante.
1
Aquí en mi morada:
Teoremas no necesarios
La elección de una sola palabra para describir
Este de cielo pintado como la capilla Sixtina
Las gaviotas parpadean en
Mi techo.
Mi ojo bien abierto /
No hay escape posible
2
No necesito a Dante Virgilio Shakespeare Cervantes
para decir:
Innegable es que el mundo es resonante
/ cosas increíbles hoy se reagrupan
Y reaparecerán mañana sentadas en
Mi almohada
3
Un pájaro persiguiendo la cola de
Una pequeña luna /
Moneda de cobre guardada en cofre con naftalina/
Una suculenta con caprichos
Regulan mis ondulaciones
Y anhelos
4
¿A quién contactar en caso de querer
ser feliz?
Posiblemente, a quien con golpes de voz de cristal
Hace agujeros de luz entera.
Incluso a quien si una hoja se soltó o la nube tembló
protocolos específicos tiene.
Cada fruta que hace presencia
Tiene un mensaje diferente
5
Nacer en el próximo instante
Inexorable
y conducirme de alguna manera
Pegando ojo oído tacto lengua … piel
Al agua metal tierra madera (fuego)
secretos el aire trae
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