Gabriel Narváez es romántico y perfeccionista. Ama lo que hace y le gusta hacerlo bien para tocar corazones y motivar sonrisas, siempre de la mano de la música, que es su mayor fuente de energía vital. El cantante colombiano nació en Cartagena, Colombia y desde muy joven se vio atraído por el arte, especialmente por la música, cuya vocación lo ha llevado a hacerla, producirla, interpretarla y caracterizarla.
«Mis inicios se dieron en la universidad, mientras estudiaba ingeniería industrial. Fueron silenciosos porque a mis padres no les parecía gran cosa que me dedicara a la música. Siempre se imaginaron a su hijo mayor detrás de un escritorio, gerenciando una multinacional. Cuando me vieron cantar por primera vez cambiaron de opinión inmediatamente. A partir de ese momento me apoyaron en la búsqueda de un horizonte artístico», recuerda el intérprete.
Una voz que se multiplica
El rasgo distintivo de su carrera musical fue sugerido por sus amigos de la universidad quienes aplaudían el hecho de que podía hacer varias voces.»La verdad, yo trataba de cantar las canciones que me gustaban tal cual como las escuchaba y notaba que a la gente le gustaba la forma en que interpretaba dichas canciones. Siempre fui muy payaso en el colegio y me destacaba por imitar los ademanes y las voces de varios de mis profesores. Cuando llegué a la universidad me dio por cantar en los pasillos como los cantantes más reconocidos de la época. A partir de ese momento se fue susurrando acerca de mi ”talento” para emular la voz de estos artistas».
Actualmente, su público y seguidores disfrutan y se emocionan con su brillante repertorio de cerca de 40 artistas: son geniales recreaciones en las que logra reflejar el particular estilo de cada cada cantante.
_¿Qué es lo más difícil de imitar a un artista?
— Lograr la duración de las sílabas, la expresión y la afinación de la melodía de cada canción. También es difícil lograr el brillo característico y el grosor vocal de cada artista.
Lo suyo es el romance
Confiesa ser un gran admirador de Luis Miguel, a quien considera el mejor de todos los tiempos. «Su potencia vocal, su afinación, su precisión, la forma en que juega con las melodías de su gran repertorio de éxitos lo hace para mí el mejor cantante de música latina. No es el más versátil, pero sí el maestro de los mejores cantantes que he conocido».
No por casualidad, el género musical favorito de Gabriel Narváez es la balada romántica, «esa que enamora, la que en sus letras usa metáforas, hipérbole, hipérbaton, y todos los artificios literarios conocidos… ah y en especial la que en sus arreglos musicales está llena de violines, violas y cellos».
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Es un artista que quiere hacer feliz a su público y se entrega a él, haciendo uso de su versatilidad y de su voz. Para ello, es importante estar en óptimas condiciones físicas, por lo que trata de dormir muy bien y comer saludablemente. No fuma y tampoco ingiere bebidas alcohólicas.
–-¿Qué es para ti el éxito?
— Es sentir que la gente te haga tocar el cielo cada vez que les cantes. Que sin publicitarte la gente te busque por cielo y tierra y logre encontrarte de las ganas que sienten de escucharte. Yo soy un cantante exitoso, no muy conocido, pero sí exitoso.
Recuerda que una de sus mayores satisfacciones es haber hecho felices por dos horas a unos ancianos que vivían en una soledad absoluta. «Cuando terminé de cantarles, recibí los abrazos más increíbles que me hayan entregado en toda mi vida», comenta emocionado.
Llegar a estar en el corazón de la gente que lo sigue es su mayor anhelo y en ese camino va dejando constancia de su talento. Que lo quieran por ser un artista real y no un producto del mercado. Gabriel Narváez es #PoderLatino
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