Siempre parece una buena idea cargar con duraznos, racimos de col rizada y hierbas cuando está en el mercado de agricultores. Es fácil olvidar que durante su traslado puede estropearse antes de que pueda comerlos. ¡Es por eso que las verduras congeladas son tan buenas!
Si no está utilizando la sección de alimentos congelados en la tienda de comestibles, definitivamente se está perdiendo de varias cosas importantes. Esta semana, Consumer Reports lanzó información sobre qué alimentos realmente vale la pena comprar congelados en lugar de frescos. Las frutas congeladas (sin azúcar agregada) como las bayas, los plátanos y la piña, los granos enteros cocidos como la quinua, el arroz integral y los frijoles, y las verduras congeladas formaron la lista de “congelados mejor comprados.
A menudo, es mejor comprar pescado congelado en lugar de fresco, ya que se congela con la máxima frescura, asegurando que todos sus nutrientes estén encerrados hasta que esté listo para comerlo.
La dietista Katie Goldberg da ideas sobre qué hacer con cinco tipos diferentes de verduras congeladas:
1. Espinacas
“La espinaca congelada es la joya de la sección del congelador, es muy versátil y mucho más barata que la fresca”, dice Goldberg. Si bien las hojas frescas de espinaca son una base de ensalada, la espinaca congelada requiere un poco más de esfuerzo, pero se puede agregar a prácticamente cualquier cosa que ya esté haciendo usando la estufa. “Agrego espinacas congeladas a casi todos los platos de pasta que preparo”, dice Goldberg. “A veces, simplemente cocino a fuego lento la salsa y las espinacas para aumentar el contenido de vegetales”. También le encantan las tortillas de espinacas y queso.
2. Cebollas picadas
Comprar cebollas picadas congeladas ahorra tiempo y lágrimas. “Ahorran el doble de tiempo porque primero, no estás cortando las cebollas, y segundo, ya están suavizadas”, dice Goldberg. Ella las usa en platos de carne molida, especialmente con chile y tacos.
3. Mezcla salteada
Hablando de ahorrar tiempo, comprar una mezcla congelada previamente picada le ahorrará toneladas. “Siempre tengo una o dos mezclas para saltear en mi congelador”, dice Goldberg. “Agregue una salsa rápida, arroz y proteínas, y la cena está sobre la mesa”.
4. Habas de soya
“Me encanta el edamame sin cáscara para agregar a un salteado vegetariano o un toque de arroz y frijoles”, dice Goldberg. También es un refrigerio fácil y saludable que a su hijo también le encantará. “Solo 30 segundos en el microondas y está listo”, dice ella. Es proteína de origen vegetal.
5. Calabacín o fideos de camote
Los fideos de calabacín y los fideos de batata se pueden encontrar en la sección congelada en casi todas las tiendas de comestibles. “Estos pueden ser un excelente iniciador de comidas bajas en carbohidratos, pero los amo como guarnición”, dice Goldberg, y agrega que es otra comida congelada que también le encanta a su bebé. “Puede agregarles su salsa favorita, que incluye queso, pesto, maní tailandés o barbacoa”.
¡Tener algo versátil en el congelador que sea legítimo con todo es el mejor truco para chicas perezosas y saludables!
FUENTE: La Voz de América
FOTOS: pixabay.com
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