La comida y la sexualidad sagrada…Trataremos el tema de la comida y el sexo en dos grandes vertientes, una en lo que se refiere a qué comer antes, durante o después del acto sexual, y la otra sobre hábitos alimenticios saludables que le ayudarán a mantener una sexualidad plena a lo largo de su existencia.
Este segundo tema es que nos ocupará en este espacio. Lo primero que debemos revisar es nuestra relación con los alimentos. Desde una óptica espiritual, todo alimento es fruto de la tierra, y es un regalo divino. También es un ser vivo que se está sacrificando para que nosotros podamos alimentarnos, así sea de origen vegetal. Así pues, ya desde el inicio, los alimentos son y deben ser tratados con sacralidad. Eso significa, respeto y amor; lo cual llena de significado el mismo hecho de comer.
El proceso digestivo se inicia incluso antes de la compra del alimento. Comienza con la sola idea de encontrarnos con él. Cuando visualizamos su necesidad y lo adquirimos. Lo observamos y lo deseamos. El alimento debe ser amado con la vista y el olfato mucho antes que con nuestra boca. Debemos palparlo, revisar sus formas y sentirlo.
La erección masculina y femenina, funciona por vascularización. La circulación sanguínea juega un rol esencial, por ende si deseamos mantener en óptimo estado nuestras venas y arterias, es importante evitar los alimentos que generen obstrucciones o fallas en nuestro aparato circulatorio. De ahí la importancia de revisar la ingesta de grasas saturadas (no presentan dobles enlaces) que se encuentran en alimentos de origen animal como carnes, embutidos, leche y sus derivados (queso, helados). Se encuentran también en aceites de origen vegetal como los aceites de coco o de palma (que se consumen a través de pasteles, productos de panadería, aperitivos salados y productos transformados).
Las grasas saturadas se solidifican a temperatura ambiente y su consumo favorece el aumento de los niveles de colesterol en la sangre.
Comidas que estimulan el sexo
La Ayurveda sostiene que la comida se transforma sucesivamente en sangre, carne, grasa, huesos, médula, y finalmente en esperma u óvulos, influyendo en la apariencia, aspecto y el sabor de las secreciones sexuales. Y divide los alimentos en tres tipos: Sátvicos, Rajásicos y Tamásicos.
Los primeros generan energía creativa estimulando los sentimientos eróticos en quien los consume. Son los llamados “Alimentos de los Dioses”. Tienen sabor dulce. Entre ellos están la miel, la leche y sus derivados, frutos secos, semillas, cereales, así como frutas y vegetales. Su consumo nos ayuda a pensar y actuar de manera correcta, ya que estimulan el éter y el aire en el cuerpo sutil, contribuyendo así al desarrollo de nuestra espiritualidad. En líneas generales, las secreciones sexuales de quienes consumen alimentos sátvicos suelen tener mejor calidad y apariencia.
La segunda categoría incluye los alimentos denominados rajásicos. Entre éstos se cuentan las comidas estimulantes, alimentos fritos, especias, picantes, te, café, tabaco, raíces y salados. Aumentan la velocidad y la emoción en el cuerpo humano y favorecen la actividad, el movimiento y el dolor. Los alimentos rajásicos son amargos, agrios, salados, picantes, calientes y secos. Son difíciles de digerir y dejan muchos residuos en el organismo. El consumo excesivo de estos alimentos nos hace ver la vida de manera pasional, impidiendo nuestra concentración en aquello que verdaderamente eleva el espíritu.
El tercer tipo de alimentos, son los Tamásicos. Necesitan tanto tiempo para digerirse que se putrifican dentro de los intestinos. Entre ellos están las carnes, el pescado, los huevos, el vino y el alcohol. Pueden producir en quienes los consumen sentimientos destructivos y activan los elementos de tierra y agua en la anatomía sutil del cuerpo, lo cual se manifiesta en el plano físico en forma de mucosidades y grasa corporal. Generan un olor corporal desagradable y estimulan el excesivo materialismo.
La sexualidad es un termómetro de nuestra salud en general. Es imposible tener buen sexo con mala salud. Elegir alimentos cuya ingesta sabemos que nos hace daño, puede ser una señal de que debemos revisar algo en nosotros a nivel interno. Los problemas de peso casi siempre tienen implicaciones emocionales. Por otra parte, el tipo de alimento que ingerimos también influye en nuestro progreso espiritual.
De acuerdo con la Ayurveda, los sabios consumen exclusivamente alimentos sátvicos. La mayoría de las personas deben también consumirlos, aunque combinándolos con la energía proveniente de los productos rajásicos y reduciendo al mínimo los tamásicos. Una dieta equilibrada es la garantía para una buena salud, para ello hay que tener en cuenta el valor nutricional de los alimentos. Algunas combinaciones son beneficiosas, mientras que otras alteran el correcto funcionamiento de la digestión. Con esto en mente, aprenda a nutrirse de acuerdo con sus requerimientos calóricos y mantenga hábitos saludables.
Luz y Paz para ti.
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