Uno de los problemas al emprender tu propio proyecto es aprender a lidiar con la falta de tiempo. Pareciera que el día no nos alcanza para nada y esto puede llegar a ser una situación grave, porque el tiempo, es el recurso más preciado para un emprendedor.
En el caso específico de la mujer emprendedora, la situación es aún más crítica, debido a que debemos sumar, a nuestro deseo de emprender, las tareas del hogar, el cuidado de la familia, y muchas otras funciones que, hasta ahora, descansan mayormente sobre nuestros hombros.
Dedique horas específicas a trabajar en su proyecto y cúmplalas: Por ejemplo, si va a iniciar el trabajo del día a las nueve de la mañana, hágalo a esa misma hora cada día y por la cantidad de horas que haya decidido que dedicaría. Sea puntual, piense por ejemplo que si estuviese trabajando para una empresa que no fuera suya, usted trataría de esmerarse en ser puntual, verdad? Pues sea puntual con usted mismo.
Tiempo de teléfono y redes sociales: Controle, de ser posible, elimine al mínimo el tiempo que pasa al teléfono o en las redes sociales mientras trabaja con su proyecto. Que las horas que le dedica sean efectivas y productivas. Las redes sociales y el teléfono móvil es un elemento de distracción, así que de ser posible no lo tenga con la pantalla hacia arriba, sino boca abajo.
Lleve una agenda: Es importante que todas las tareas asociadas a su proyecto las tenga listada en una agenda, con fechas específicas para ser completadas. Existen softwares y apps que le permiten llevar un control de las actividades que debe completar. En mi caso, nada ha podido sustituír mi agenda de papel. Aprenda a tachar según complete tareas y al agregar las nuevas, asegúrese de asignarle un nivel de prioridad (bajo, medio o alto).
Cuidado con procrastinar: Al final de cada semana revise su agenda y verifique si hay una tarea que la ha ido pasando de día a día. Si encuentra una, mi recomendación es que le asigne prioridad alta y la ponga como lo primero que debe completar al siguiente día. Aunque hagamos lo que amamos siempre hay tareas que no nos gustan, en mi caso por ejemplo, es leer la documentación relativa a las actualizaciones de los plugins de mi página web, algo muy técnico que no me emociona para nada. Identifique que tareas son y asegúrese de trabajar en ellas lo antes posible.
Evite ser perfeccionista: Esta es una de mis debilidades. Podrían creer que duré un par de años en lanzar mi proyecto porque sentía que nunca era “el momento perfecto”. No le estoy invitando a ser mediocre o descuidado, ojo, solo que siempre habrá oportunidades de mejora en todo lo que haga. Solo termine la tarea de la mejor manera posible y no la deje sentada esperando situaciones perfectas que probablemente solo se encuentran en su mente.
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