Lo que se pensaba hasta ahora era que el virus se transmitía únicamente de hombre a mujer o entre hombres.
Se ha documentado el primer caso de transmisión sexual de mujer a hombre del virus de Zika en Nueva York, lo cual aumenta las posibilidades de que la enfermedad pueda extenderse mucho más allá de los países en los que ya es endémica y donde los mosquitos son la fuente de contagio más importante.
Durante meses la preocupación por el riesgo que plantea la transmisión sexual de la enfermedad no ha dejado de aumentar; sin embargo, lo que se pensaba hasta ahora era que el virus se transmitía únicamente de hombre a mujer o entre hombres.
“Este es el primer caso detectado de transmisión del virus de Zika de mujer a hombre”, se leía en un informe de los centros federales de Control y Prevención de Enfermedades y el Departamento de Salud e Higiene Mental de la Ciudad de Nueva York.
La evidencia de un medio de contagio no documentado previamente es el último giro del brote de un virus que continúa confundiendo y sorprendiendo a los principales expertos. Esto da pie a que las autoridades se replanteen, una vez más, estrategias para limitar el peligro de infección que asumen los trabajadores del sector sanitario y el público en general, ya que el grupo de personas que puede estar en riesgo va en aumento.
Gran parte del mecanismo de funcionamiento del virus es un misterio y sigue siendo un gran reto detectarlo, pues el 80 por ciento de los infectados no muestra síntomas. En el caso de aquellos que sí lo hacen, la enfermedad a menudo es leve y no necesita tratamiento.
No obstante, el zika puede suponer un gran riesgo para las mujeres embarazadas. Ataca directamente células nerviosas en el feto y puede provocar microcefalia, bebés con cabezas anormalmente pequeñas y daño cerebral. Además, también puede causar problemas en el desarrollo después del nacimiento.
El zika
El zika se transmite principalmente mediante el mosquito de la fiebre amarilla, Aedes aegypti, que crece en climas tropicales. Once países han documentado casos de transmisión sexual de hombre a mujer. Entre las 1130 personas que han recibido diagnóstico positivo de zika en el territorio continental de Estados Unidos, 320 eran mujeres embarazadas y 15 de los casos se presentaron por transmisión sexual, de acuerdo con informes del CDC.
El caso de Nueva York es el primero en el que una mujer infecta a un hombre y esto aumenta las posibilidades de que otros hombres (sin historial de viajes a zonas afectadas por zika y sin motivos para sospechar que pudieran tener el virus) puedan contagiarse, transmitir el virus y crear una nueva cadena de transmisión.
En el informe, los investigadores descubrieron que un hombre, de unos 20 años y que no había viajado fuera de Estados Unidos durante el año anterior al contagio, contrajo el virus después de un caso de coito vaginal sin condón con una mujer que había vuelto recientemente de un país donde el virus es endémico.
La Dra. Mary T. Basset, inspectora de salud de la ciudad de Nueva York, comentó que había varios factores en este caso que podrían haber aumentado el riesgo de infección. El hombre no estaba circuncidado, la mujer estaba en la primera etapa de la enfermedad, cuando su carga viral era más alta, e iniciaba su ciclo menstrual.
La mujer, de quien se dijo tenía unos 20 años y no estaba embarazada, tuvo relaciones sexuales con su pareja el día que regresó a la ciudad. El informe no menciona el país que visitó. El virus ahora está en casi 50 países de América del Sur y el Caribe.
“La mujer tuvo dolor de cabeza y cólicos mientras estaba en el aeropuerto antes de regresar a Nueva York”, señala el informe. Al día siguiente, sintió una serie de síntomas asociados con el zika como fiebre, fatiga, erupciones, dolor de espalda, hinchazón en las extremidades, sensación de adormecimiento y hormigueo tanto en manos como en pies.
Dijo que su menstruación, que había iniciado ese día, era más intensa de lo normal.
El médico que la atendió envió muestras de sangre y orina a los laboratorios del departamento de salud del estado y la ciudad para analizarlos. Las pruebas fueron positivas para el virus, pero no se encontraron anticuerpos contra este, lo cual sugiere que la mujer se había infectado recientemente, ya que lleva entre cuatro y cinco días que el cuerpo comience a producir anticuerpos.
Siete días después del contacto sexual, la pareja de la mujer presentó fiebre, seguida de erupción, dolor en las articulaciones y conjuntivitis. El informe asegura que el hombre no había tenido otras parejas sexuales recientemente ni le había picado por un mosquito la semana previa a la enfermedad.
Tres días después, el hombre fue al mismo médico que había diagnosticado con zika a su pareja. El médico envió las muestras de orina a los mismos laboratorios y se confirmó la presencia del virus.
Según el informe, el hombre “no menciona haber notado sangre en su pene sin circuncidar que pudiera asociarse con el sangrado vaginal ni ninguna herida abierta en sus genitales inmediatamente después del coito”.
No está claro si el virus fue transmitido al hombre a través del sangrado menstrual o a través de flujo vaginal. Si el virus fue contagiado mediante flujo vaginal, hay muy poca información sobre cuánto tiempo podría sobrevivir en este o de cual es el riesgo de transmisión durante el coito.
El informe cita un estudio reciente en primates en el que se encontró que tres hembras no preñadas presentaban el virus en el flujo vaginal hasta siete días después de la exposición.
“Se necesitan más estudios para determinar si el virus también se puede encontrar en el flujo vaginal de los humanos y, si es así, durante cuánto tiempo”, se lee en el informe.
Ya se sabía que el zika podía transmitirse a través del semen, donde puede sobrevivir durante meses. Las pautas actuales emitidas por las autoridades de salud señalan que los hombres que hayan estado expuestos se abstengan de relaciones sexuales o usen condón durante seis meses.
Además, se aconseja a las mujeres embarazadas o que busquen concebir que no tengan sexo sin protección durante ese tiempo con hombres que han estado en zonas donde el virus esté extendido.
Fuente: nytimes.com
