El diseño latino sigue apoderándose de las pasarelas mundiales y es notorio que cada vez son más jóvenes los que apuestan por desarrollarse en este campo tan maravilloso y reñido a la vez. Por ello, conversé con un grupo de jóvenes diseñadoras venezolanas que con tenacidad y mucho talento, han sabido destacar sus creaciones, convirtiendo su juventud en una carta a favor.
En esta nota, comparto la entrevista que le hice a Andreína y Anaís Jiménez, dos hermanas venezolanas con personalidades muy distintas, pero un objetivo en común que las ha unido aún más desde hace varios años: Enaltecer la belleza latina a través de un diseño venezolano vanguardista y muy chic en piezas de baño.
Andreína Jiménez es Diseñadora Gráfica de profesión. En un largo viaje a la vibrante ciudad de Miami, disfrutando de sus playas y recorriendo sus calles, se impregna de su sabor latino y decide crear su propia línea de trajes de baño, piezas de moda que tanto a ella como a su hermana siempre le han encantado, como buenas venezolanas. Andreína regresa a Venezuela con esta idea palpitándole y Anaís, que es Administradora, se une al proyecto, no sólo para darle formalidad y estructura al emprendimiento, sino también para aportar su toque creativo a esa primera colección y a las que en ese momento ni sospechaban que estaban por venir.
Estas entusiastas hermanas estaban convencidas de poder crear piezas adaptadas a diversos cuerpos y que esos “pero” que tuvieron para no usar algunos trajes de baño, iban a capitalizarlos en experiencia para crear atributos de su propia línea.
¡Y se cristalizó el sueño!
Luego de muchos desvelos, las hermanas Jiménez crean su línea de trajes de baño, combinando modelos básicos con otros más atrevidos, tanto en forma como en estampados. Luego de un par de años, Andreína y Anaís afirman que las características principales que distinguen a Ross Paradise son:
Diseño. “Dedicamos muchísimas hora a estudiar, discernir y crear cada pieza. Nos gusta que sean distintas, que salgan de los patrones comunes. También nos encanta jugar con las telas y sus combinaciones entre unicolor y prints.
Calidad. “Garantizamos que cada pieza tenga perfectos acabados, así como trabajamos con telas duraderas.”
Esencia: “A cada uno de nuestros trajes de baño le imprimimos nuestro toque personal. Son creadas con verdadera pasión y procuramos que nuestras clientas sientan que están vistiendo piezas hechas con muchísimo amor.”
–¿En qué se distinguen los trajes de baño venezolanos de los del resto del mundo?
–Cada país y sus diseñadores tienen una forma maravillosa y única de resaltar. Sin embargo, para nadie es un secreto que en Venezuela los diseñadores de trajes de baño estamos prácticamente obligados a importar nuestros materiales, ya que por la crisis que atraviesa el país lo encontrado en el mercado nacional es casi inexistente. Así que como importamos las telas y otros materiales, el gran reto está en la creación. Por ello, nuestra fortaleza está en una altísima calidad de la mano de obra. Casi todas las piezas son muy artesanales, hechas a mano y en gran parte eso le da un toque muy distintivo. Definitivamente, crear y producir moda en Venezuela es un gran reto, pero eso no lo convertimos en motivo de lamento, sino en crecernos por encima de la crisis. Las venezolanas y las latinas en general, son un público muy exigente, pues siempre se han caracterizado como una mujer muy coqueta, de esas que dicen “antes muerta que sencilla”. Y, por supuesto, lo delicioso del trabajo es convertir esa exigencia en satisfacción.
–¿A qué se debe el auge del diseño venezolano dentro y fuera del país?
–En época de crisis, nacen nuevas oportunidades. Y en el caso venezolano algunos diseñadores –lamentable o afortunadamente -hoy en día han podido ocupar espacios que antes le hubiesen sido muchísimo más cuesta arriba. También los venezolanos estamos más identificados y arraigados con lo hecho en casa. Hoy muchos hasta prefieren el diseño venezolano que marcas de renombre mundial. Y en caso del exterior, sin duda la gran cantidad de venezolanos en todos los rincones del mundo han ayudado a impulsar lo Hecho en Venezuela. Estar afuera y usar diseño venezolano es una forma de estar conectados con el terruño. Aunque, por supuesto, los extranjeros también aprecian nuestra creatividad y buen gusto, que se ha dejado en manifiesto desde hace ya muchísimo tiempo atrás por grandes diseñadores nacidos en nuestro país que hoy gozan de renombre en el diseño mundial.
Otro sueño hecho realidad es ETHNOS, que es es una mezcla de estampados étnicos y audaces cortes geométricos. En ella hemos querido resaltar que Venezuela desde siempre ha sido la cuna de muchas etnias y aún hoy sigue estando llena de esa diversidad. “Queremos inspirar y promover la unidad cultural. Todo ello bajo la premisa: No importa tu etnia, sin duda tenemos un modelo para ti”.
De emprendedor a emprendedor
Aún queda mucho de este año y Ross Paradise Swimwear apuesta en conquistar justamente la ciudad donde nació la idea del emprendimiento: Miami. Ello a través de participación en show rooms y diversas paralelas. Esto sin abandonar al público venezolano, que le ha dado tanto apoyo desde sus inicios.
Anaís y Andreína tienen una vibra que contagia. Siempre que tengo la oportunidad de hablar con ellas sobre su trabajo, se dibuja en mí una sonrisa de inspiración casi de forma automática. Por eso, dado todo lo que ha crecido su marca, no dudé en pedirles un mensaje para aquellos que quieren emprender pero aún no dan el salto. Me dijeron con la firmeza dulce que las caracteriza:
“No hay que dejarse vencer por el miedo. El miedo sólo paraliza. Lo que hay que hacer es ver el lado positivo de todo. Si hay algo que nos parece imposible, vamos a analizarlo y enumerar todo lo positivo que tiene y que podría tener. Pensamientos negativos siempre va a existir, pero debemos vencerlos con constancia y pasión. Quien es constante, tiene el éxito asegurado.”
–¿Su juventud les favoreció o jugó en contra?
–Afortunadamente, hasta ahora el hecho de que somos muy jóvenes nos ha beneficiado. En los eventos que hemos participado, algunos cuando después de ver nuestras piezas, nos conocen, quedan asombrados por nuestra juventud y hasta elogian el hecho. Por otro lado, ha sido fabuloso poder inspirar a otros jóvenes, especialmente venezolanos, que sumidos en la crisis caen en la desesperanza. Ha sido gratificante poder motivarlos con nuestro emprendimiento a trabajar por sus sueños y demostrar que en momentos difíciles es cuando debemos demostrar todo lo precioso que tenemos por dentro.
Ross Paradise Swimwear
No me queda la menor duda, cuando conocí a Andreína y Anaís Jiménez en una edición de la Feria del Ateneo de Caracas (evento que es un claro ejemplo de la situación venezolana, desde diversos puntos de vista), sabía que ellas habían nacido para brillar. Y me satisface comprobar cómo brillan día tras día a través de cada una de sus creaciones, que lucen con orgullo las mujeres amantes del glamour, la exclusividad y la comodidad. Si quieren conocer más de esta marca venezolana, les invito a visitar www.rossparadise.com y seguirla en Instagram como “RossParadiseSW”
Dicen por allí que el que quiere, puede. Yo diría que el que ama (aunque no rime como la otra frase), puede. Pues cuando realmente amamos un sueño, nada ni nadie puede detenernos hasta verlo materializado. Definitivamente, en el diseño venezolano hay amor, ¡mucho amor! Tanto, que este espacio me quedó corto para compartir sobre mi experiencia con jóvenes diseñadoras venezolanas. Pronto, más diseño y más amor.
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